sábado, 5 de enero de 2008

Cerré una puerta... ahora abro tantas...

Al principio de todo, estaba realmente dolida. Me sentía exactamente como describe esta canción, ni yo misma lo habría explicado mejor.

Pero me levanto cada vez más rápido de las caídas y desde luego siempre saco cosas buenas de ellas. He pasado por todos los colores (como si de un moratón se tratara) y por todos los sabores: primero noté la sal de las lágrimas, luego todo se volvió agrio y amargo... pero ahora, ahora todo es tan dulce...Y lo reconozco, te guardé rencor un tiempo. Incluso podría decir que ese rencor en realdad iba dirigido a mi, por haberme abandonado, por no cuidar de mi persona y dejarme convencer de que era poca cosa. Por no hacer nada que evitara que mi autoestima quedase a ras del suelo. Era obligación mía y no tuya, el no dejarme pisotear por nadie.

Ya no me siento pequeñita. Es más, me gusta tanto en lo que me he convertido en pocos meses... ¡me estoy descubriendo por primera vez y cada día me quiero más! Y por ello, si miro atrás no me arrepiento de nada. No soy quien era antes de conocerte hace unos años. El tiempo me ha macerado y cambiado... pero tú también. Y por eso te escribo, para darte las gracias (de corazón).

Gracias, porque ahora valoro más que nunca las verdaderas relaciones humanas, el calor que me proporcionan mis amigos. Gracias, porque me hecho lo suficientemente independiente como para disfrutar de mi compañía en soledad... y lo suficientemente grata, como para saborear cada segundo que me dedica cualquier persona que quiera caminar conmigo. Gracias, porque mirando atrás y viendo desde la lejanía cómo he llevado todo, he descubierto que estoy hecha de una madera especial... me falló la edad, por eso "soporté", pero siempre te respeté, y aunque tuve razones para hacerlo, nunca perdí los papeles, nunca te pedí nada... sé que no puedes echarme nada en cara. Gracias, por enseñarme que tengo tanto potencial. Gracias, porque si no hubiera sido por nuestras conversaciones, probablemente ahora sería más cerrada de mente. Gracias, porque ahora tengo claro qué relaciones no quiero para mí. Gracias... porque no sería quien soy, de no haber estado contigo. Gracias, porque ahora me dejo llevar por mis impulsos como hoja que se lleva el viento. Gracias, porque he aprendido a respetarme sobre todas las cosas. Ahora rio, canto, salto, disfruto... hacía tanto que no sacaba la payasa que llevaba dentro y todo ello lo hago, porque hora SÉ QUE SOY FUERTE.

Sé que ahora el que está mal eres tú. Me consta que nunca has sabido tener una pareja. No dudo que eres buena persona... y de hecho creo que la próxima te va a salir bien. Sé que todo esto te ha enseñado. Sé que tú también has cambiado. Sé que vas a ser feliz y espero qué así sea. Sé que no vamos a volver a vernos, yo prefiero dejarlo todo aquí. Así que te deseo mucha suerte en el camino. Que encuentres lo que buscas. Y nuevamente GRACIAS, por la caída.

20 comentarios:

Belén dijo...

me alegro que estés levantándote guapa!

me alegro mucho de veras ;)

Y encima como una señora, deseándole lo mejor ahí está mi niña!!!!!!

besossss

Desesperada dijo...

Qué razón tienes. Siempre se aprende más de los malos ratos, en el amor sobre todo. yo aprendí a no dejar nunca más de ser como soy, a escoger lo que me conviene y no dejarme llevar como una adolescente. y el rencor... para qué, si es que es un fardo inútil. bicos, Martiña

Mariano Zurdo dijo...

La vida es esto, aprender de lo malo para ser más fuerte, porque lo malo viene de oficio y hay que aprovecharlo.
La utopía sería poder aprender sólo de lo bueno, pero...
Un besazo enorme y zurdísimo para la pequeña gran saltamontes.

Irreverens dijo...

Qué entrada tan estupenda, Mart@.

Sin duda alguna el tuyo es un enfoque excelente para ir por la vida.
En cuanto al último párrafo... ¡cuántas veces no me habré planteado yo si estoy hecha para vivir en pareja!

En fin, estamos aquí para aprender y poco más.

Un abrazo

Navarro dijo...

Y cuanto nos enseñan en este mundo y qué pocas son las veces que decimos gracias...
Muy conmovedor el relato, me volveré a pasar por estos lares xD
Saludos y besos!

Mart@ dijo...

BELÉN: Un beso muy fuerte, me gustan mucho nuestras pequeñas charlas.

DESESPERADA: Aprender a no dejar de ser como soy es efectivamente una de las cosas que más me ha cosatado a mi también jeje.
Otro besiño

MARIANO: Cierto es.
Un besazo distrísimo para ti ;o)

IRREVERENS: Pues la verdad, es mejor estar solo que mal acompañado, así que si crees que estás mejor sin pareja ¡hay tantas cosas que pueden llenar tu vida!
Otro abrazo ¡y feliz año! que a ti no te había dicho nada jeje

NAVARRO:¡Bienvenido! muchas gracias por pasarte, estaremos en contacto pues.
Más besos (estoy hoy de un besucón jajaja)

Anónimo dijo...

No te conozco de nada, es la segunda vez que entro por aquí, pero me ha llamado mucho la atención este post. Me parece valiente y sobre todo me ha hecho reflexionar sobre lo que nos pueden llegar a cambiar las personas y sobre lo poco que cuidamos, muchas veces, a nuestros seres más cercanos.

Sólo leyéndote, se te ve feliz, con lo cual el cambio de tu vida ha sido bueno. Seguro que en el futuro será mejor.

Por cierto, acertada elección con la canción.

Saludos.

Hyku dijo...

Lo que no mata, suele hacer más fuerte...
De mayor quiero ser como tú...bueno, me harán falta un par de operaciones de estética, ejem...pero bueno, en definitiva...eso, levantarme tras los golpes quitándome el polvo y sin dar importancia a las cicatrices y arañazos, cual Indiana Jones de la vida...

Saludotes
:-)

Carlos Añejo dijo...

Esto es clase, y lo demás son aulas.

Anónimo dijo...

Poco hay que decir que no te hayan dicho ya.

Solo puedo decirte que sigas siendo como eres y que no cambies nunca y que en caso de hacerlo sea a mejor (si es que se puede).

Un besazo muy grande.

Navarro dijo...

eyyy pequeña saltamontes!!! Ayer tuve una conversación con una amiga que le había dejado el novio...y me vino este texto a la cabeza...con vuestro permiso, copio y se lo pego en un mail (lástima que no tengas el botón para enviar el post a los amigos).
Gracias por esas palabras xD
Besitos!!
P.D: Ahora voy corriendo a leer tu última entrada ;)

Jove Kovic dijo...

Un abrazo valiente, ya sabes dónde estoy si necesitas algo.

Jove Kovic dijo...

Quería decir "un abrazo, valiente, ..."

Anónimo dijo...

Me ha encantado leerte. Y tienes mucha razón en lo que dices. Un bseo.

Anónimo dijo...

Buenas!he llegado hasta aqui por recomendación. Increible. Conmovedor. La cuestión es cómo consigues todo esto. Anonadada me dejas. Enhorabuena por ser. Yo sigo reinventandome.
Un abrazo
;-)

Mart@ dijo...

Bienvenida Llama Perdida!! Todos nos reinventamos continuamente, no te creas. Gracias por pasarte por aquí.
Un besazo y hasta pronto ;o)

Mart@ dijo...

NAVARRO, si me dices como se pone el botón ese, yo lo pongo ;o)

Un bezooo

JGVA dijo...

Yo siempre digo que lo bueno de tocar fondo es que solo queda una dirección posible: hacia arriba!

Quiérete! Y se libre!

Marta G.Brea dijo...

Hola tocaya!! Es la primera vez que visito tu blog y me ha encantado. Descubro con sorpresa que me has linkeado, muchas gracias!!, yo haré lo mismo.

Excelente texto, enhorabuena, sobre todo porque ahora sabes que eres más fuerte!

Bss

Javi dijo...

Hola,
Mi primera visita por tu blog y no podía ser mejor.Me ha encantado la actitud super-positiva y optimista de tus palabras.
Me alegro que la caída tan solo deje una rozadura, esas sanan con el tiempo y nos hacen mas fuertes.
Una despedida con mucho estilo!

Saludos